martes, 24 de febrero de 2009






Karnival!





Carnival!





Carnaval!










Here We Go!
Viernes, Sabado, Domingo, Lunes y ahora Martes tambien.


Esta fiesta multicultural, sobrenatural, y bellisima se esta llevando acabo mientras yo estoy escribiendoles estas palabras, sin embargo, me detengo un segundo a decir unas cuantas cosas, refelxiones mas bien.


Ésta será una fiesta con mucha cerveza, música y comida, pero no quiere decir que no he aprendido de ella. Los últimos días, así como he estado hechando la fiesta y viendo a la gente bailar, beber, comer, dormir y despertar en medio del tumultoso carnaval... tambien he estado descubriendo algunas cosas. Por ejemplo, el Sábado de Carnaval (éste día el Carnaval se lleva a cabo en la noche) llegué a WallMart de Paseo Montejo con unos amigos metaleros de Cancún, y me encontré parada en un mar de gente, conocida y desconocida, platicando, riendo, bebiendo. -Ésta vez- pensé, como algunas otras -realmente no se que es lo que estoy haciendo parada en este mar de gente, en esta ciudad, en este momento-. Y en cuanto ese pensamiento me vino a la cabeza alguien chocó conmigo -Cheese! que pedo? donde están todos?.- pregunté al desafotunado que habia golpeado mi brazo derecho. -No se wey, yo acábo de llegar y Astrid ya se me perdió, creo que anda medio peda.- Desde ese punto en la noche, me despegué de la banda metalera para caminar errando por todas partes agarrada del brazo de Cheese, mi fiel y bonachón compañero. Bueno, se preguntarán "'¿Que tiene que ver todo esto con crecer, Carmen?", les responderé; ese fue el momento en el que me di cuenta de lo multifacética que me he vuelto. No me hizo falta esta acompañada de nadie, estaba feliz sola, perdida entre el mar de gente, agarrada de Cheese, un amigo al que he visto dos o tres veces y con el que he tenido platicas muy profundas. Pero asi como estaba agarrada de Cheese que me guiaba sabiamente entre la gente... estaba completamente sola, y lo mejor es que estaba sola y feliz.





Creo que tengo la habilidad de disfrutar casi todo lo que me pasa, para bien o para mal, y sacarle el sabor a las cosas para tornarlas en algo positivo... o al menos eso quiero creer.




Esa noche, me encontré a muchas personas, y es bien cierto eso que dicen de Merida, que es como una provincia por que todo el mundo se conoce... a medida que la noche avanzaba, más me empeñaba yo en demostrar mis habilidades sociales con algunos amigos, presentandoles a fulano y a sutano, sólo para descubrir que se habian conocido la semana pasada en un rave, o que su tío había trabajado con ellos, que eran primos o que la mamá de sutana habia estado en esá obra de teatro que yo me perdí por andar hechando la fiesta o por andar trabajando. Todo esto me resultó muy gracioso (aqui cabe aclarar que no sé si me resultó muy gracioso por las dos o tres cervezas que ya traia encima o porque en realidad tuviera un chiste el asunto) y terminé la noche tomandome millones de fotos con amigos, felices, haciendo tonterias (arriba hay una donde sale Cheese dandome un besito y Astrid con mucha cerveza encima)




El Domingo de Carnaval tuve enseñanzas muy tremendas.


Un amigo que conocí recién llegada a Mérida, desde hace un mes me habia pedido el Domingo de Carnaval para él. (El Domingo de Carnaval se hace durante el día). Y este personaje exótico, llamado Hanzel, ese día me introdujo a un mar de personas nuevas.




Sentados todos en una de las gradas de paseo Montejo, sufriendo el sol de las 12 del día, con un carrito de supermercado lleno de hielos, cerveza y cartulinas (que tenian leyendas estilo "I <3>



Mario, el mejor amigo de Hanzel, explicandome sobre su trabajo, me dio a conocer frases completas en Maya (ok, parentesis rapidísimo, una cosa que amo de Mérida es el hecho de que aquí, a diferncia de Puebla, la gente tiene en su vocabulario, un amplio repertorio de palabras en Maya, desde términos como Xic que significa Axila, como adjetivos, verbos, y demás. Esto se me hace fascinante, por que no solo promoven la vida de la cultura antigüa, tambien la abrazan, creo que esto es algo que deberia de servir de ejemplo, México es un país lleno de historia Mestiza, India, Española, etc, por que solo recordar la última antes del "etc"?.) Tambien me hizo reflexionar sobre algunas cosas, me dijo que la gente que interrumpe mucho (como yo) aunque lo haga por querer saber los detalles y sacarle mas jugo al asunto, después de un tiempo resulta tediosa y aburrida (hice una nota de todo eso).




Pamela por su parte, la segunda amiga de Hanzel, me habló sobre los cenotes, las grutas, las señoras Mayas con las que trabaja y la cultura Maya en general, me habló de un mundo tan fascinante que sentí el impulso en ese momento de ponerme a estudiar Antropologia solo para tener una prueba de lo que estas cosas significan.




Hanzel por su lado, no solo me platico un poco mas de su vida, que siempre es interesante escuchar ya que ha tenido una vida tan increible y sólo tiene 24 años!... tambien, como todas las veces que lo veo, trato de convencerme de lo loco que está, sin importarle el hecho de que yo no considero que está loco, solo que es un excentrico. (Haha, ahora que lo recuerdo, me hizo sentir mal diciendome que el no consideraba que yo fuera una excentrica :/ quiero ser excentrica!, es sinonimo de especial?... haha)




Así, mientras el carrito de supermercado se vaciaba (habian 3000 latas de cerveza dentro!) las horas pasaban y hablabamos más y más sobre la vida, sobre filosofia, sobre la cultura maya, sobre lo que el carnaval significa, sobre lo que debería de significar.







Anoche (Lunes de Carnaval) Lllegué con Dafne, una amiga de mi Roomie, Ivonne, al carnaval, pero el desastre de gente hizo que a los 20 minutos de haber llegado hubiera perdido track de ella, y no fue hasta cuando su mamá nos hizo el favor de recogernos que la volví a ver.

El chiste es que me perdí entre la gente, y no me sentí mal de estar solita ni un momento.

Antes creia que mi miedo más grande era estar sola, perdida, y creo que esa fue una razón muy grande entre los "porqué"s de lanzarme a vivir sola en Mérida, queria demostrarme que podia vencer mis miedos (haha, y creo que exageré un poco con ese porqué), pero anoche, perdida entre la gente que gritaba "marquesitas! marquesitas con Nutella!" y los borrachos, y los puestos de cerveza me encontre a mi misma bailando al ritmo de tambores de gente que alguna vez vi en alguna fiesta, o con la que habia discutido de algún tema estúpido. En ese momento, todo tuvo sentido, perdí mi miedo y me dediqué a buscar entre la gente razones para estar solita. No solo las encontré, tambien las puse en uso anoche mismo.




Bueno ya, basta de hablar del carnaval, que se hace tarde y ya que hoy es el último dia de Carnaval y no se para cuantos carnavales más andaré en Merida, creo que necesito darme un regaderazo, ponerme sunscreen, unos jeans y tennis y salir a buscar entre el tumulto una razón más para ser feliz :)




Algo más, el chiste de este blog es que sepán que no todo en mi vida es fiesta, tambien aprendo.




Carmen :)






















3 comentarios:

  1. alooo? si se puede comentar!
    que sucede!?

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  2. Hola hola! BIENVENIDA! No pude leer tu blog (estoy en el trabajo) pero te prometo leerlo en casa y lo pongo entre mis favoritos!!! loving you much, as always, your momMin

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  3. WOW! Qué increible! Has logrado tu propósito, hija. No sólo festejas, sino aprendes también! Muy muy interesante, tu blog, bien escrito y lleno de alegría y energía. ¡Felicidades! Por cierto, no estoy de acuerdo con el título - la tuya es una historia que SÍ quiero oir...

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